Mujer con mujer. Mi experiencia como voluntaria
En esta lluviosa primavera nos acercamos a mujeres que ejercen la prostitución. Mi expectativa como voluntaria era máxima, porque iba a visitar un prostíbulo y lugares de carretera. Venía a mi cabeza esos lugares iluminados que siempre pasamos de largo consintiendo y sospechando lo que sucede…
Con lo que una se encuentra es con mujeres, sin más y sin menos.
El encuentro, dejando al lado a la profesional y a la voluntaria, lo que realmente nos une es que somos mujeres y desde ahí se produce el encuentro.
Llevábamos información sobre prevención de enfermedades de transmisión sexual, métodos de prevención de embarazos, donación de preservativos masculinos, femeninos y lubricantes.
Ellas nos acogieron, como la primavera acoge la explosión de la naturaleza, con espontaneidad y atención.
Llama a mi atención las palabras: “Yo no soy Puta” de una de ellas o “Yo estoy aquí, pero esto no es vida y me voy a ir de aquí.”
Ellas mismas exigen ser miradas desde el soy Mujer y vengo de … tengo hijos/as por ellos/as estoy aquí…
Al final es un reclamo a la sociedad (en este caso a Médicos del Mundo): estamos aquí apartadas del mundo (Prostíbulos) o tiradas en la carretera (en las rotondas o carreteras secundarias) pero que sepáis que SOY MADRE, ESPOSA O PAREJA DE, INMIGRANTE O ESPAÑOLA, POBRE… ¡Y lo más importante SOY MUJER!!!!!!!!!!!!!!!! Como TÚ
En este mundo patriarcal, la prostitución (la compra de sexo de mujeres, en este caso) es una consecuencia de la lacra y el poder que este sistema genera. Ellas necesitan de hombres y mujeres que dibujen un nuevo sistema de Igualdad de oportunidades, de miradas, …
Ellas necesitan nuestro tiempo para compartir vida, SUS VIDAS.
Ana Cabria Corral, Voluntaria de Médicos del Mundo Castilla-La Mancha
Categorías
Archivo