Su mirada me persiguió durante varios días tras verla en el Festival de Cine de San Sebastián y todavía, de vez en cuando, él aparece en mis pensamientos, Arquímedes Puccio, el patriarca de este clan. Impresionante historia.
De qué va
La película está basada en un hecho real que sucedió durante los años 80 en Argentina y que conmocionó a la ciudadanía. Arquímedes Puccio fue un contable que también realizó ciertos “trabajos” sucios para el Servicio de Inteligencia del Estado durante la dictadura. Pero con la llegada de la democracia el patriarca dejó de “trabajar” para este servicio y decidió seguir haciéndolo por cuenta propia y así mantener su buen nivel de vida además de “proteger” a su país. De forma que se dedicó a secuestrar personas de su entorno en su propia casa con la connivencia e implicación de la mayor parte de su familia.
Sensaciones
Esta película es de las que quedarán marcadas en mi memoria. No es sólo la historia que cuenta, que de por sí ya es increíble, sino que a ello sumamos la actuación de los actores y actrices (vais a alucinar con Guillermo Francella – Arquímedes), la banda sonora, que irrumpe en escenas casi imposibles acabando en una combinación magistral de acción y rock, o la cuidada puesta en escena de los años 80. Además, el hecho de ser una historia conocida no le resta interés a este trabajo.
Recorrido
2015 Festival de Venecia: León de Plata a Mejor director
2015 Sección Perlas en el Festival de Cine de San Sebastián
2015 Festival de Cine de Toronto: Mención Honorable en la sección Platform
2015 Festival de Fine Arts: Mejor Director, Actor y Película
Anécdotas
Pablo Trapero, director y guionista de “El Clan”, realizó una extensa investigación que se vio limitada por la escasez de información de los medios tradicionales (diarios de la época). Así que gran parte de la historia fue suministrada sobre la base de testimonios de amigos y de parte de la familia que se animó a hablar. De hecho, habló con familiares de víctimas y con personas involucradas directamente que llevan sus nombres propios en la película.
En esta búsqueda, Trapero se sorprendió porque hubo gente que no quiso ser entrevistada ya que creían que los Puccio eran inocentes. De hecho, hoy en día hay gente que sigue pensándolo.
Cuando Arquímedes Puccio supo que se iba a rodar esta película, contó a un medio de comunicación que quería conocer a Pablo para que se contara toda la verdad. Pero no pudo ser. Puccio murió a los pocos días.
El realizador también investigó la relación que Puccio tuvo con Aníbal Gordon, integrante del grupo parapolicial autodenominado Alianza Anticomunista Argentina, la Triple A, “juntos participaron en secuestros extorsivos ya en 1973, e increíblemente por esos años Arquímedes fue acusado de tráfico de armas, cosa que hizo a través del Servicio Diplomático. Y quedó libre. Estaba protegido», asegura Trapero.
Con poco más de quinientas mil entradas vendidas, se convirtió en la cinta más exitosa en su primer fin de semana en la historia del cine argentino, superando a “Relatos salvajes”, que había conseguido vender cuatrocientas cincuenta mil entradas en su primer fin de semana en 2014.
Competirá como Mejor Película Iberoamericana en los Premios Goya y también será la representante argentina en los Oscars.
Los hermanos Almodóvar realizan parte de la producción de este trabajo.
Los profesionales opinan
“La historia del clan Puccio puede observarse hoy como coletazo evidente de una lógica de funcionamiento social que la dictadura selló a fuego: la violencia como herramienta de disciplinamiento y progreso económico, el ocultamiento, la falsedad, la omisión y la complicidad como espíritu de época”. Alejandro Lingeti – La Nación.
“Las mejores escenas de la película son aquellas en las que la cámara sirve como elemento familiar, casi analizando de forma sistemática el cómo funciona este clan, el cómo se mantiene en pie en una era de información accesible. La fidelidad de los Puccio a defender lo maligno de sus principios es espeluznante, pero no porque se trata de un acto de mal, sino porque el concepto de familia es sagrado y así se representa en “El Clan”. Federico Furzan – El otro cine.
“Trapero apuesta al thriller y el melodrama para narrar, más que los hechos delictivos propiamente dichos, la relación dentro de ese núcleo familiar, pero con el eje puesto en el vinculo entre Arquímedes y Alejandro”. Juan Pablo Russo – Escribiendocine
Para terminar
Sí, es una peli dura. Sí, hay algunas escenas violentas. No, no se recrea con esas escenas. Sí, merece la pena.
¡A ver qué os parece!
Isabel Eguiguren- Voluntaria de Comunicación en Médicos del Mundo Navarra
@MdMNavarra
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